O Canteiro, Celas de Peiro. Culleredo.
Habia ganas de churrasco y decidimos ir a uno de los locales de referencia en la zona, O Canteiro en Celas de Peiro. El local se encuentra en el nucleo de Celas de Peiro a pie de carretera. Es la tipica casa de una planta en la cual el bajo esta destinado al restaurante. En la entrada hay una pequeña terraza protegida de los elementos en la que si nos apetece podemos disfrutar del churrasco.
Una vez dentro nos encontramos con el tipico bar y al fondo un clásico comedor sin grandes estridencias decorativas pero muy agradable y sobre todo luminoso. Personalmente no me gustan los comedores sombrios, afortunadamente no es el caso.
Tras indicarnos Carlos con su habitual simpatia la mesa que nos tenia preparada nos trajo la carta donde pudimos ver que hay un poco de todo, desde el famoso churrasco de la casa, pulpo a la brasa o bacalao. Carlos nos recomendo el salpicón (11€) de entrada. Era el tipico salpicón con gambas, palito de cangrejo, etc… El plato podemos definirlo como correcto sin más, no muy cargado de cebolla y vinagre como hacen en algunos lugares.
A continuacion llego el churrasco de ternera (9.50€) acompañado de un buen chorizo criollo (1.80€). El tamaño de la racion es más que suficiente para salir satifecho y sobre todo la calidad de la carne. Trozos grandes y con la cantidad justa de grasa, un buen corte y sin tendones ni nervios. El sabor era espectacular, por algo tiene fama el local, bien cocido por dentro y con el tostado justo en el exterior. 
La carne era jugosa y con ese retrogusto ahumado que te deja la parrilla al final. Lo mismo puedo decir del chorizo, bien hecho por dentro sin estar carbonizado por dentro. Hay muchas parrilladas que entienden que hacer el churrasco es dejarlo sobre la brasa y cuando se acuerdan darle la vuelta. Un buen churrasco hay que estar encima de él dandole la vuelta regularmente para que se vaya haciendo uniformemente. 
Por supuesto acompañamos el plato por las reglamentarias patatas fritas (0.85€) bien fritas y para nada aceitosas.
Para los postres nos decidimos por la opcion de tomar algo casero, tiramisu (3.20€) servido en copa individual de sabor suave y un poco dulce de más segun mi socio, a mi no me lo parecio tanto pero yo soy un amante del dulce, asi que seria cuestion de gustos. Tomamos tambien un flan de queso (3.20€) que a mi me gusto mucho por su sabor potente y abundante caramelo.
Regamos estos platos con un mencia de Valdeorras, Joaquin Rebolledo (11€). Un clasico vino gallego tinto con toques afrutados y que marida de maravilla con el churrasco.
El pan de la casa (0.80€) era bollo y lo puedo calificar como muy bueno. Miga esponjosa y corteza consistente.
Por supuesto finalizamos con los oficales cafeses de pota y bautizados con el aguardiente servido en la ya clasica botella de Cardhu reciclada.
Un buen lugar para degustar un churrasco bien hecho y a un precio razonable. Lo recomiendo.
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