Os Cen Pasos, Pontedeume. A Coruña.

Nos apetecía viajar en el tiempo y decidimos visitar el Feirón Medieval de los Andrade en la preciosa villa de Pontedeume. Tras pasear por su mercado medieval había que cenar algo y nos decantamos por uno de los establecimientos hosteleros de la villa tras la desastrosa experiencia de un churrasco que nos intentaron “cobrar mal” el año pasado mal en los tenderetes del mercado. Fuimos a una pulpería de las de “toda la vida” con un curioso nombre, Os Cen Pasos, supongo que es por la distancia que hay desde la salida del pueblo al local.
Se accede al local tras baja por una empinada rampa ya que el local se encuentra en un sótano en el medio de una cuesta. El local es pequeño pero muy agradable, todo decorado en madera clara.
La carta es sencilla y con todo lo que te puedes esperar en este tipo de pulpeiras.
Tras consultar con la camarera para que nos orientara un poco nos decidimos empezar por un superpulpo (23€) que es una macro ración del cefalópodo. Son dos raciones en una pero con un precio mejor que si pides las dos por separado. El pulpo tenía buen tamaño y no había apenas puntas de patas ni cabezas. El pulpo estaba bueno si bien había algún trozo que variaba un poco la textura con respecto a los otros, nada grave. Nos llamo a todos la atención el sabor de aceite de oliva que aliñaba el plato. No cabe duda de que era oliva virgen y con toque picante y no debido al pimentón. Un buen detalle es que sazonan poco el plato y tienen un salero y pimentón en la mesa por si quieres cargarlo más.
Seguimos con unos mejillones al horno (4.50€) y aquí sí que tuvimos un fallo. Los mejillones como veis son muy pequeños, no sé si que hay problemas con el suministro debido a la marea roja pero si es por eso mejor no los pongas. Además estaban un poco pasados de horno y el sabor no era como debería. De hecho se notaba el sabor del pan rallado de la salsa y nada más.
Finalizamos con una de las especialidades de la casa, la zorza de pollo (7,50€). Trozos de pechuga sazonados al estilo de la zorza con patatas. A todos nos encanto el plato, la carne estaba muy tierna y jugosa. No era aceitosa y el toque justo de picante, como pudimos corroborar luego ya que no nos produjo los temidos efectos secundarios de la zorza. Las patatas fritas estaban en su punto óptimo de fritura.
El pan (1€) era un bollo de Neda de corteza tostada y esponjosa miga, muy rico y perfecto para mojar en el rico aceite.
Para acompañar y como hacia algo de calor decidimos tomar un D.O. Rías Baixas, Pazo de Seoane (9€). El vino al principio estaba demasiado frio y no pudimos apreciarlo hasta que subió un poco la temperatura. En principio es un vino muy suave y ligero, muy fácil de tomar pero sin ese despliegue de aromas de los Rías Baixas clásicos. Un buen detalle es que pusieron enfriador para que el vino se mantuviese fresco.
Se tomaron los cafés (1€) pero no había mi tan reivindicado café de pota. Lo que si nos pusieron en vez de la típica botella de aguardiente para hacer el café aragonés ( con jotas ;)) unos sobres monodosis de aguardiente.

En resumen una pulpeira clásica en el entorno de Pontedeume donde disfrutar de las clásicas raciones a un precio correcto, lastima de los mejillones. Volveria sin ningún problema.