Punta Nariga. Malpica. A Coruña.

Hay lugares que tienen una magia especial y hoy quiero que me acompañéis a uno de esos lugares mágicos que hay en Galicia. Un paisaje que no os esperáis encontrar en plena Costa da Morte o da Vida como me gusta llamarla a mí. ¿Estáis preparados para descubrir un lugar que os despertara emociones que creíais dormidas? Vamos a Punta Nariga

¿Como llegar? Seguro que muchos conocéis el pueblo pesquero de Malpica, pues en diez minutos llegamos a Punta Nariga. A la salida del pueblo tomamos la DP 4307 en dirección a Ponteceso y tras recorrer unos 4 kilómetros encontramos tras unas curvas cerradas la DP 4306 a Punta Nariga a la derecha. En el camino nos encontraremos con esta preciosa cruz de piedra, quien sabe si para espantar los malos espíritus o para santificar el lugar donde hubo una muerte.

Recorreremos una carretera desierta tras pasar por unos aerogeneradores, no hay casas, no hay arboles…¿no estáis escuchando a Enya de fondo? o quizas las banda sonora de Local Hero.

Por el camino iremos observando extrañas formaciones de rocas que le dan un aire extraño al lugar, puede que sean legendarias criaturas transformadas en piedra por causa de algún misterioso hechizo.

Gargolas atormentadas por algún oscuro secreto

Un felino durmiendo o quizas agazapado para saltar sobre nosotros. Usad la imaginacion.

Un llagarto que nos amenaza con sus fauces.

O vemos asomarse a el cuello de un ave que vigila nuestra presencia o ¿es un dinosaurio fosilizado?

Hasta que llegamos al faro, el ultimo faro construido en España y que es obra del arquitecto Cesar Portela. Una estructura en piedra integrada con el entorno que asemeja un barco que desafía la bravura del Atlántico en esta Costa da Morte.

Desde su cara al mar se puede distinguir la proa y el puente de mando de un antiguo titan de acero que cruzaba los mares llevando a tantos gallegos en busca de fortuna a América

Fijaos como se integran las caprichosas formas rocosas con el primer nivel del faro.

El faro como mascaron de proa posee una bella escultura que recuerda a Kate Winslet en Titanic.

A la izquierda vemos el cabo del Roncudo y a la derecha las islas Sisargas.

En las Sisargas hay otro faro que al anochecer entra en acción para guiarnos en los misterios de la noche.

Os recomiendo visitarlo al anochecer, cuando los faros empiezan a desplegar su encanto y dotar a la atmósfera de una luz prodigiosa. A ser posible una noche despejada ya que el espectáculo que nos brinda la bóveda celeste es espectacular debido y puede ser paradójico hablando de faros a la escasa contaminación lumínica.

Con un poco de suerte veremos pasar el velero del pirata Benito Soto rumbo a su fin en Gibraltar.

Espero os disfrutaseis conmigo de esta breve excursión de un paraje que tiene un especial significado para mi y al que siempre me gusta volver